lunes, 24 de agosto de 2009

Y...¡No a las Naranjas Mecánicas!


(La Imagen en la parte superior, se muestra la cruel escena en donde el sometimiento mental del programa "Ludovico" atormenta a "Alex" para hacerle un "Hombre de Bien", eliminando sus instintos agresivos a base de traumas constantes. Esto en el largometraje del cineasta judío Stanley Kubrick "A Clockwork Orange")


"La Naranja Mecánica", como se le conoció a este controvertido "megafilm" en la década de los 70's, fue una de las creaciones cinematográficas y artísticas que mas causó revuelo en Europa, Norteamérica y América Latina como nunca antes visto. Su rigor en el tema de la experimentación humana en el interior nervioso, con fines "plavlovianos" de reformar una conducta negativa, impactó severamente áreas de la comunidad científica que se venían desarrollando hábilmente.


Cuando hablo de estas áreas de la comunidad científica, me refiero a los campos de la neurología y psicología de antaño, que alguna vez codiciaron para un futuro extremo, fármacos y metodologías concretas para poder obligar la reacción del Ser Humano a abstenerse de ciertas conductas indeseables o determinadas, y con esto depurar el raciocinio liberal del hombre, por la cual escoger de conciencia y fé su propio compromiso con la sociedad y sus implicaciones hacia sí mismo. Este panorama, no sólo se puede contemplar desde el ámbito científico, sino también sobre el religioso: Ejemplo adecuado resulta la Edad de Oro, en la cual Católicos efervescientes atracaron la conducta de millones de ciudadanos europeos, para enrraizar comportamientos intolerantes y agresivos, en contra de las demás manifestaciones dogmáticas, con la finalidad de devoción.


Sobre este tenor precisamente, es el nombre que se le adjuntó a esta obra literaria y cinematográfica, la cual me gustaría tomar como apunte de explicación: "Naranja", sobre la metáfora de ser una fruta, creación de la naturaleza con color propio y dulzura. "Mecánica", cerrando la afirmación de ser objeto a un control conductual, por parte de factores ajenos, el cual altera ferozmente la capacidad propia de Ser, dejando a un lado todos aquellos elementos naturales que alguna vez le caracterizaron. Con esta pequeña metáfora, se trata de comparar e identificar al Ser Humano, sumergido en patrones de conductas forzosos, los cuales hacen de manera intermitente perder su calidad natural, sus propiedades inherentes.


En el filme, sin motivo de narrar la historia completamente, se ve la serie de calamidades, que un jovenzuelo delincuente, holgazán, vividor, drogadicto, arrogante y violento es tomado a un proyecto de laboratorio neurológico denominado "Ludovico"; en el cual severamente se le transmite una "video-terapia" sobre violencia y sucesos devastadores de la humanidad, aunado a la inyección constante de un medicamento, que le obliga a su sistema nervioso producir la sensación de náuceas y malestares intestinales en respuesta a lo que ve y escucha. Ello bajo el deshumano propósito de convertirlo forzadamente en un "Hombre de Bien", pues su enfermedad (su voluntad hacia los actos violentos) le estaba causando graves daños, según los científicos.

Sin embargo, lejos de proporcionarle una vida llena de optimismos y esperanzas. Su conducta queda marcada por una serie de traumas contínuos, los cuales le impiden seguir viviendo como cualquier persona. Sus transtornos le oscurecen su camino, así como los sucesos en su vida personal. Muere a causa de las lesiones de un suicidio fallido, lejos de entender realmente lo que sucedía, lejos de ver por su voluntad y en el deseo atróz de un "Mundo Acorde...".

Significativamente dentro de este suceso, imperó un "magnicidio" no solamente al interior nervioso de un Ser Humano, sino aún mas profundo, a su "Libre Albedrío". A su capacidad de decidir en qué Ser, en cómo Ser... En tomar su naturaleza personal y combinar esas características en la vida misma, buscando una armonía adecuada a la vida de quienes le rodeaban y su voluntad. Esta facultad, la cual ha contraído un sin número de estudios filosóficos y dogmáticos, y dentro de éstas, múltiples debates de su existencia y desarrollo en nuestras vidas, no solamente puede ser detrimentada en el caso descomunal que acabamos de mencionar. Por el largo y ancho de la Historia hemos de entender otras formas despiadadas.

La Institución más poderosa en lo que va del tiempo: La Iglesia, ha sido protagonista de métodos sádicos e ihumanos para "adoctrinar" a sus "fieles" por el paso de los tiempos. "La Santa Inquisición", uno de los organismos en España encargados de procurar el "saneamiento", a todos los quebrantadores de la palabra sagrada, tuvo la "obligación divina" (por si fuera poco) de ANIQUILAR a todo aquél contrario a la palabra del Señor, todo contrario a las ordenanzas celestiales del Papado, todo contrario a sus ideas. Con el fin de procurar una sociedad religiosa desde el más mínimo de sus integrantes. El desajuste de la Libertad de Credo, provocó por décadas la persecución de Hombres y Mujeres Libres en mentalidad, tratando de emular un ejemplo para las generaciones venideras. Esto evocó en la Reforma Protestante en Alemania, con Martín Lutero, decidido a cambiar las reglas del juego.

Un caso similar se originó por mucho tiempo en el III Reich en la Alemania Nazi. En la década de los 40's la organización policial "SS" (Schutzstaffel), quien muy a parte de configurar una red infalible de espionaje en el suelo germano, también usó su estructura para erradicar todo aquél contrario a las prioridades del Emporio Hitleriano. Las diversas manifestaciones exigiendo un alto total a las ejecuciones y persecuciones de judíos y activistas políticos, nunca tuvieron un impacto en la sociedad. Esta "máquina de tormento" puso a temblar a Alemania, y bajo el terror sembró una ideología con punta de lanza. La aceptación de la sociedad de una "doctrina maniaca", no era producto del orgullo de la raza aria, sino de la tristeza de la impotencia. De los nombres que aún quedan guardados en la resistencia de convertirse en "Naranjas Mecánicas", Sophie Scholl, conocida como la "La Rosa Blanca", sobresale por su coraje al enfrentarse desde su pupitre universitario al aparato gubernamental.

Más casos como estos, los podríamos mencionar hasta vaciar nuestros libros de Historia Universal; sin embargo, hay uno en especial que no se encuentra escrito en ellos, y que muy desdichadamente he notado en estos días. La Globalización aunado a traernos grandes maravillas, como la Internet (¿qué haríamos sin ella?) también nos ha llevado a adoptar una costumbre "materialista" desde lo mas sensible nuetro. Este sentido nos ha adentrado tanto, que psicológicamente estamos preparados para decir, que si no tenemos un objeto (cuál sea) no somos importantes. "La moda" (dentro de cualquier situación) nos induce a pensar que tiene prioridad, por razón de ser venidera de otras naciones "urbanas", y que debemos acomodarnos a tal entorno para ser aceptados, si no, no somos parte de la "Sociedad". Sin lugar a dudas, es un golpe constante en nuestras neuronas, que nos obliga perder lo realmente importante, nuestro Ser mismo... Y caemos en simples "Naranjas Mecánicas"

Es doloroso ver como una gran mayoría de nosotros, llega a ser sujeto a un "sometimiento mental" por parte de ajenos, para hacernos ahogar de ideas, costumbres, doctrinas o dogmas, que suelen ir en contra de nuestros deseos y aspiraciones como verdaderos Seres Libres, Seres de Verdad... Que nos convierten y envenenan en "Conductistas" irracionales, imitando los pasos de una tendencia que no entendemos. Olvidamos quienes somos, nuestras verdaderas creencias, raíces culturales y propósitos solidarios que ostentamos con quienes compartimos amor. Se ve decaída ineludiblemente nuestra responsabilidad dentro de todos los sentidos, y nos perdemos en las paredes de concreto del miedo. Sin embargo, aún de todo ello, son muchos quienes dicen "No, esta vez No", y hacen la diferencia... Deciden no ser parte del racimo de esas "Naranjas Mecánicas"...

A manera de cierre, quiero poner un extracto del cual en otras ocasiones he hecho mención, y siento que podría explicarnos mejor esta metáfora ...

"Un prisionero, herido y convaleciente, yace recostado en un poste dentro de un establo, casi no puede hablar ni ver
... El Médico, enviado por el capitán, revisa sus heridas y alcanza a oir entre sus gemidos una voz quebrada...
...Por favor, ayúdame, no quiero seguir así, me duele, me duele mucho...Por favor, termina con esto, termina con mi vida...
...El Médico ve la situación del pobre hombre, y sabe que es difícil, sabe que no hay otra opción...
...Toma una inyección con anestecia, se acerca a su oído y le dice... Esto no dolerá campeón...
...Minutos después de haberle administrado una fuerte dósis de este fármaco, le deja caer...

...Toma su maletín y se aleja del cadaver de inmediato...

...El Capitán que entraba al establo, asombrado de lo que veía, le exclamó furioso... ¡Señor!, ¿Qué ha hecho Usted!... ¿Cómo se atreve?... ¡No le ordené matarlo!...
...El Médico nervioso le expresa... Sus heridas, Señor, eran terribles, jamás había visto semejante cosa...
... ¡Bien me pudo haber obedecido!... El Capitán consumido por su ira, le interrumpe en gritos...
...El Médico, baja su mirada, y con una voz sumamente seria le dice... ¿Obedecer?, ¿Así nada mas?, ¿Sin pensar?... No señor, yo no puedo... quizás cualquiera en esta campaña si, pero yo no... Eso solo lo hacen personas como usted...
(Extracto del Filme "El Laberinto del Fauno", de Guillermo del Toro)

jueves, 13 de agosto de 2009

...Del Conocimiento



 (La Imagen Superior representa a "Baphomet", Deidad atribuída a los Caballeros Templarios, de la cual siempre se presumió un lado obscuro para las creencias cristianas; motivo suficiente de una condena a muerte.)


El Conocimiento, para muchos Doctrinólogos se le entiende como aquél resultado final del proceso de "Metacognición", en el cual la Información obtenida en el medio que nos desarrollamos (ya sea por parte de una persona, situación u objeto), pasa a ser parte de nuestro sistema mental, y de un acervo compilaciones de aprendizajes intermitentes para su próxima utilización. El Conocimiento ha sido estudiado por la Ciencia a partir del Siglo XVIII, sin embargo su apreciación ha sido cultivada desde civilizaciones remotas. A tanto, que existía una descriminación de élite para acceder a conocimientos diferentes, los cuales conllevaban a una mayor responsabilidad, tanto para quienes lograban éstos, como para los que le rodeaban.

Aunque en la actualidad existan divergentes teorías a cerca de la concepción del conocimiento y su construcción en nuestro interior nervioso, el conocimiento nos aporta la capacidad de entender la previsión de sucesos futuros, de poder comprender los hechos de antaño, y sobre todo de actuar decisivamente en el presente. El Conocimiento nos abre las puertas a navegar sobre nuevos confines nunca antes vistos por nuestros ojos, y creer en lo que pocos entienden y muchos temen y reniegan. Muy a parte de crear en nosotros personas de visión, crea algo más acérrimo: RESPONSABILIDAD. Pues es éste un arma de doble filo, la cual por nobleza debe de conducirse en pro del "Greatest Good", del bien comunal.
Dentro de algunas culturas sobresalientes en este aspecto, tenemos por citar al Antiguo Egipto ; quienes llenos de misticismos y códices secretos, consideraban que el conocimiento no se adquiría... se ganaba, y que a partir de ahí existía una división jerárquica social. Largas eran las jornadas de constante trabajo de aprendizaje, las que llevaban ciertos candidatos a "Monjes de Escrituras" en templos ocultos y retirados. Los grandes esfuerzos físicos bajo el intolerante Sol del desierto, aunado a la permanencia mental para las labores de devoción, simplemente eran inhumanas. Sin embargo, el honor de ser los Futuros Guías de toda una civilización, así como Seres Garantes del significado de sus mas preciados tesoros, realmente no tenía comparación.

Sobre los conocimientos que podían haber tratado, se habla de los manuscritos de "Hermes Trismegistos" o "Thot", conocido por los Antiguos Egipcios como Deidad de las Escrituras y el Conocimiento. De los cuales certeramente no se tiene por bien conocer el contenido, pero se abunda de un Conocimiento Supremo a cualquier otro sobre la tierra. Uno que cuya vinculación trasciende las barreras del Universo y nuestras esferas. Uno tan elemental que origina el contacto con un Ser Superior, y del cual emanan grandes aprendizajes los cuales hacen entender nuestra propia naturaleza y destino terrenal y espiritual.
Desde otro punto del Orbe, en la cultura China el "Tao" (el "camino") manejó parámetros herméticos en torno a los conocimientos que se desprendían entre sus prácticas. "Lao Tse" considerado fundador de esta Doctrina Filosófica, destacó aprendizajes en relación al ritmo de la vida del Hombre, en conjunto a los procesos cósmicos del Universo y la Naturaleza que le rodeaba. Expresó dentro de sus tratados, que la casualidad era inexistente, y que por lo tanto cada acción evocaba en una reacción, las cuales inherentemente se encontraban previstas en armonía con el Universo. Todo estos conocimientos, eran fuertemente custodiados por decenas de "Monjes Taoístas", quienes eran admirados por sus intelectos y habilidad en las artes.
Según la cultura Taoísta, los Monjes estaban acostumbrados a escalar montañas de grandes alturas sin utensilios, a soportar extremidades climáticas constantemente, a vivir largos periodos de tiempo en bosques y praderas en solitario, y a alimentarse de lo que la naturaleza les proveyera, sin dañar a los animales. Todo ello con el afán de preparar en cuerpo y alma a las nuevas generaciones de portadores de este conocimiento trascendental, del cual exageradamente pocos ostentaban
El andar del Conocimiento ha sido largo, y sus manifestaciones severas; ello ha dado motivo a que su cautela estuviese siempre presente, para alejar a todos aquellos no apropiados a tener entre sus manos algo tan valioso. "Los Labios de la Sabiduría están cerrados, excepto para los Oídos del Entendimiento.." reza un Proverbio Hermético figurando la importancia de mantener en oculto aprendizajes, inclusivemente para el propio bienestar de los nuestros. Quizás uno de los hechos de la Historia, aún indescifrables y vinculado a lo anterior, es la manta de misterios que ha envuelto a las Cruzadas en Medio Oriente, iniciadas por el Órgano Eclesiástico denominados así mismos "Caballeros Templarios".
Aunado de haber sido de las fuerzas bélicas más temidas, fueron también ostentadores de grandes secretos descubiertos en sus expediciones en Tierra Santa. Uno de los más grandes, motivo y pretexto de su escandalosa desaparición fue el "Baphomet". En sí declarado por el Papado como un objeto de adoración pagana y maligna, éste representó para los Templarios una fuente inagotable de sabiduría, la cual solamente se tenía acceso mediante méritos en la Organización y una vida ejemplar.
El "Baphomet", lejos de ser una Deidad como se les ha imputado irracionalmente a esta Élite de Caballeros, era un símbolo del cual emanaba una perfecta armonía de significados. Sólo su nombre, del cual sobresalen varias respuestas, se puede descifrar tal importancia, entre ellos... "Bautismo de Luz", "Bautismo por el fuego" "El Padre del Templo", "Abridor de la Puerta", "Mahoma", "Juan Bautista"... y el más interesante en mi concepción... "SOPHIA", "Sabiduría" en Griego. Aunque todas y cada una de estas connotaciones referidas a este Símbolo, tienen por ende su manera de traducción. "Sophia" se obtiene de un prestigioso método utilizado en el alfabeto hebraico, para ocultar información clave entre los mensajes; se cree que este sistema haya sido fuertemente operado por esta Organización Militar.
La representación de "Baphomet" a la que los Templarios hacían mención, era una cabeza de tres caras, las cuales mostraban un estado anímico distinto. En todas aparecía un Anciano o un Macho Cabrío, a veces con barba, y en otras ocasiones con cornamenta,. ¿El Significado? El Anciano para los Sarracenos como símbolo de sabiduría y poder, al igual que el Macho Cabrío para los Judíos y Egipcios. Las tres caras simbolizaba las tres letras del Supremo Creador "YHV", "Yahvé". Y finalmente la cornamenta se definía como la corona que iluminaba su conocimiento, y como armas guiadas con fines celestiales.
Sin embargo, dentro de la ilustración del "Baphomet" manejada por Eliphas Levi (en la parte superior), destaca por ser la conjunción de las Leyes Herméticas y otras connotaciones importantes: la antorcha sobre su cabeza, equivalente al calor de su "iluminación hacia los iniciados"; "el pentagrama" sobre su frente, en relación a "Sirio" como Primer Deidad sobre la Tierra, la posición de las manos, señalando "como es arriba es abajo"; las palabras en sus brazos "Solve" y "Coagula", reflejando "la causa y efecto"; el falo y los senos femeninos atribuído a "la dualidad de las cosas"; las serpientes entrelazadas en su abdómen simbolizando "el constante movimiento del universo"; y el estar sentado sobre el Mundo, como "dominio de la vida terrenal".
Y bien, luego de esta explicación simbológica, tratando de desenmascar menos de una milésima de parte de este conocimiento, llegamos precisamente a ello, al Conocimiento, a su importancia en ciento por ciento. Como hemos de notar, a través de numerosas culturas se ha preservado que generaciones tras generaciones, sea inculcada la gama de conocimientos necesarias para poder procurar el progreso de una civilización. Aprendizajes que no competen a todos, puesto que el entendimiento en su cabalidad requiere de una personalidad preparada, apta para asumir la RESPONSABILIDAD de sí mismo y de sus semejantes. Tal iluminación contraerá magníficos resultados, empero el deber de llevar a buen puerto los actos venideros del mismo.
Para terminar, comento una pequeña anécdota de "Sun Tzu", Estratega y Autor Chino del "Arte de la Guerra"; quien al terminar su dictado sobre el último capítulo de éste, exclamó a Sun Bin, su discípulo... "Hijo mío, que este humilde tratado no caiga en manos erróneas, la devastación no son de estas hojas, sino de quien vierta uso en ellas..."